Habitualmente nos preocupamos de llevar a los niños a las revisiones pediátricas que correspondan para controlar que su crecimiento está evolucionando correctamente y tener al día su cartilla de vacunaciones, pero ¿tenemos las mismas inquietudes por la salud visual infantil? En muchos casos no. Y esto es especialmente importante en momentos como este, cuando se acerca la vuelta al cole.
La vista de los niños debe ser cuidada al mismo nivel que su piel: los ojos son extremadamente sensibles y muy valiosos en su día a día y requieren una protección y atención especial.
Debemos estar atentos a protegerlos de forma adecuada tanto del sol como de otros elementos externos que puedan afectarles:
- utilizando gafas de sol,
- empleando gafas especiales si van a manipular elementos que suelte polvo o partículas y
- eligiendo las gafas deportivas adecuadas en cada caso: natación, esquí, etc.
Debemos, además, revisar su vista periódicamente para comprobar que ven correctamente: la primera revisión debe realizarse alrededor de los 3 años y a partir de ahí cada dos años. Por supuesto si notamos cualquier problema o el niños tiene antecedentes familiares de problemas de visión severos deberemos revisar su vista antes del año. Además, hay muchos padres que no lo saben, pero el 30% de los casos de fracaso escolar está relacionado con una mala visión.
Si en la revisión se detecta algún problema y nuestro óptico nos recomienda el uso de gafas, debemos tener en cuenta estos 9 consejos para elegir las gafas de los niños y conseguir que se adapten perfectamente a ellas:
- Elegir una montura que se adapte a la forma de su cara: no deben ser demasiado grandes para que las lentes queden perfectamente centradas.
- Elegir una montura de fácil adaptación: con puentes nasales blando y ajustables, y varillas flexibles.
- Escoger lentes orgánicas: ofrecen mayor protección y seguridad mientras el niño está jugando.
- Invertir en un tratamiento endurecedor para asegurar la máxima durabilidad.
- Invertir en un tratamiento antirreflejante: muchas veces las luces del aula pueden reflejar e interferir en la concetración.
- Invertir en lentes reducidas: son más ligeras y dan mayor calidad de visión.
- Debemos asegurarnos que la lente cubra bien el ojo para que sea donde sea que el niño mire no tenga problemas.
- Si realiza algún deporte deberíamos plantearnos elegir a mayores una montura de líena deportiva que se adapte a la actividad deportiva practicada: no son sustitiutivas de las gafas comunes, sino complementarias.
- Invertir en un par de seguridad: tener otras gafas de repuesto por si acaso el niño las rompe puede ahorrale varios días sin una perfecta visión mientras que se cambian las lentes.
Y como broche final queremos haceros una recomendación: permite que el niño elija sus gafas, que decida los colores, etc. de esta forma nos aseguramos de que su predisposición a usarlas sea mucho mayor.
Tanto si necesitas revisar la vista de tu hijo como comprarle unas gafas nuevas, ponemos a tu disposición la óptica con mayor variedad de marcas de Lugo y Ferrolterra. Ven a visitarnos y te aconsejamos.